Forjad espadas de vuestros azadones, lanzas de vuestras hoces; diga el débil: Fuerte soy.
Joel 3:10 RVR1960
Este es el punto de vulnerabilidad y dolor, es aquí el lugar de quiebre y la tecla intocable. Todas tenemos un talón de aquiles, desde tus hijos, esposo, padres e incluso el dinero; lo peligroso de nuestro "talón de aquiles" es que existe un enemigo de nuestras almas que constantemente busca dañarnos, e inmediatamente reconozca nuestra área vulnerable sabrá atacarla con violencia. Sin embargo, lo que el Padre busca de nosotras para esta temporada es que presentemos nuestro punto de quiebre delante de Él y lo ENTREGEMOS, porque en sus manos estará seguro. Nuestro Padre busca formar en nosotras mujeres vulnerables para Él pero fuertes como muralla para el mundo y para las tinieblas. No se trata de una exigencia inalcanzable, antes bien consiste en CONFIAR plenamente en Dios y establecerlo a Él sobre todo.
Busca un tiempo a
solas y trata de ubicar "tu talón de aquiles", luego presentalo al
Señor en oración y déjalo en la seguridad de sus manos.
¡ Ahora disfruta ser hija de Dios, quién te rodea por completo!
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