“Dios mío, tú fuiste quien me formó en
el vientre de mi madre. Tú fuiste quien formó cada parte de mi cuerpo”
Salmo 139:13 TLA
Quizá te has preguntado porqué naciste en esa
familia, con esos padres y en esa parte del mundo. Muchas mujeres han atravesado la
incómoda escena de enterarse que no fueron soñadas por sus padres, mucho menos planificadas, y ellas son el producto de un mal cálculo o una
mala decisión.
Muy
posiblemente en tus días no tan buenos has renegado de vivir y rechazado el
momento de tu concepción, si esto es así
no te culpo, el sistema del mundo ha querido convencer a la humanidad
que su origen es una casualidad y que realmente no fueron soñados por nadie.
Un
evento planificado
“Me
viste antes de que naciera.
Cada
día de mi vida estaba registrado en tu libro. Cada momento fue diseñado antes
de que un solo día pasara” Salmo 139:16 NTV
“Mi
princesa, con mucha delicadeza busqué el
momento oportuno para tu llegada, más allá de los planes humanos de tus padres tú ya eras mi plan perfecto. Yo
decidí soberanamente la fecha de tu llegada
a este mundo; con celo velé por ti en el vientre de tu madre y estuve
encargado de la correcta formación de todos tus miembros, planifique sigilosamente
tu nacimiento, tú eres mi sueño hecho realidad; nada de ti es una casualidad,
todo fue diseñado para llevarte a mi propósito.
Aunque
tus padres terrenales no tengan idea que fueron mi instrumento para
materializarte, aunque ellos no te manifiesten amor, quiero que entiendas que
mi amor es tuyo por completo, no pasas desapercibida en mi corazón y grabado
tengo tu nombre en mi memoria… porque eres mi plan soñado y mi evento
planificado.”
Con amor: tu Padre Celestial.
Un
plan resguardado
No conozco tu edad, solo sé que si ya
llegaste a este punto de la carrera es porque el Padre te ha resguardado; con
amor sus brazos rodearon tu vida para que nada ni nadie interrumpiera su plan
contigo.
Puedes estar convencida que su amor te
va a preservar hasta el fin, que el velara por ti y por el cumplimiento del
propósito que te entregó.
“(…) él tiene cuidado de vosotros” 1 Pedro 5:7
No necesitas un cuerpo de seguridad
entrenado y armado para proteger tu vida, el amor del Padre es suficiente para
que estés segura donde te encuentres. Tu Padre sobrepasa abundantemente todo poder
humano, él es el todopoderoso, el dueño de todo el universo y tu su hija; ¿que
podría ser mayor que esto?
No hay comentarios:
Publicar un comentario